Debemos estar convencidos de que, si aspiramos a obtener resultados diferentes e innovadores, tenemos que iniciar por nosotros mismos.
Originaria de la comunidad San Jerónimo, municipio de Telpaneca, departamento de Madriz, Hellen Tatiana Gutiérrez Cruz, ha visto materializado su sueño de cultivarse académicamente. Su excelencia académica y deseos de superación la llevaron a inscribirse primeramente en la Escuela Normal Superior Mirna Mairena Guadamuz, del municipio de Estelí, donde estuvo interna durante tres años hasta obtener el título de Profesor de Educación Primaria. Estando en la Normal, clasifica en la carrera de Física-Matemática en el Centro Universitario Regional (CUR) Estelí UNAN-Managua, donde actualmente cursa tercer año.
La excelencia académica ha sido una constante en la vida de Hellen Tatiana. Muestra de ello es que ha ganado diversos concursos de lectura, que conllevaron a su participación en las Olimpiadas de Lengua y Literatura a nivel nacional, en las que dejó muy en alto al centro educativo de su comunidad, donde tenía que recorrer alrededor de seis kilómetros diarios para asistir a clases. En su paso por la Escuela Normal, se destacó con su participación en el coro, grupo de danza, así como en concursos de oratoria, redacción y otras disciplinas. «Cuando cursaba mi segundo año en la Normal decidí que tenía que aprovechar mi tiempo al máximo y me prematriculé en la Universidad. El tomar esta iniciativa fue todo un reto, que me permitió combinar la didáctica con el conocimiento científico de la Física-Matemática».
En 2023, cuando cursaba el segundo año de la carrera, ganó el primer lugar en el concurso nacional de mejor estudiante normalista. Hellen Tatiana rememora que, al asumir este reto, se enfrentó a una intensa jornada de preparación académica, que al final tuvo su recompensa: «Durante la mañana hacía mis prácticas en la escuela de aplicación, por la tarde realizaba los planes de clase y hacía mis tareas de la Universidad y por la noche me preparaba para el certamen nacional». El galardón trajo consigo la plaza de docente en educación primaria. Actualmente, se desempeña como docente en el Centro Escolar Julio César Castillo Ubau, en el municipio de Condega.
Con mucha satisfacción, agradece el apoyo de sus padres, quienes siempre le inculcaron la importancia del estudio, a pesar de encontrase en un contexto diferente, pues su papá es agricultor y su mamá, ama de casa. Ella agradece las oportunidades de formación brindadas por el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, que restituye los derechos en materia educativa, a través de diferentes programas. Así pues, en su núcleo familiar, Hellen Tatiana y sus dos hermanos ya son profesionales.
Entre las satisfacciones de la docencia, menciona el hecho de compartir conocimiento y conducir a los estudiantes hacia un aprendizaje significativo. «El brindar una educación de calidad y verlo reflejado en el avance de los estudiantes es la mejor satisfacción, porque el éxito del docente es el éxito de sus estudiantes».
Con apenas 20 años de edad, Hellen Tatiana tiene claro que el docente de hoy en día debe ser resiliente, capaz de adaptarse a los nuevos escenarios educativos y de transformación curricular. «Debemos estar convencidos de que, si aspiramos a obtener resultados diferentes e innovadores, tenemos que iniciar por nosotros mismos». Su meta a corto plazo es obtener el título de Profesor de Educación Media (PEM) en el CUR-Estelí y, posteriormente, el de licenciatura en Física-Matemática.